La cámara de Viajes en Caleidoscopio se adentra en el corazón de un pueblo inconfundible, el birmano, de la mano de su más genuina expresión: los niños. Miradas ancladas a tan sólo cuatro kilómetros de su país natal, estos 'pequeños' viajeros por necesidad, llegan hasta la localidad de Mae Sot (Tailandia), con la esperanza de una vida mejor. Fotos: Danuta-Assia Othman.
4 comentarios:
el agua sucia o limpia siempre tiènè vida y brilla con la luz del sol la misma luz encuentro en los ojos de los niños de estas fotos
son maravillosos...
ME ENCANTAN ESTAS FOTOS...
Muchas gracias Sofía! :D
Publicar un comentario